Durante décadas, el marketing fue sinónimo de persuasión. La lógica era clara: más visibilidad, más ventas. Pero el consumidor del siglo XXI no solo compra productos, compra creencias, historias y valores. En este nuevo escenario, surge el marketing con propósito, un enfoque que trasciende lo comercial para convertirse en una herramienta de transformación social, cultural y ambiental.
¿Y por qué esto importa? Porque marcas sin propósito están quedando fuera del juego. Según un estudio de Zeno Group, las personas son 4 veces más propensas a comprar, 6 veces más propensas a proteger y 4.5 veces más dispuestas a recomendar marcas con un propósito fuerte y claro.
En Colombia, ya no estamos hablando de tendencias futuras. Estamos viendo ejemplos actuales, palpables y poderosos de empresas que están alineando su razón de ser con causas relevantes. Y lo mejor: están creciendo con ello.
Foto: Cortesía Bohío tomada de artículo de Colombia Visible
Fundada en Envigado, Antioquia, Bohío Playa nació con una misión clara: demostrar que la moda no tiene por qué ser una industria contaminante o excluyente. Sus prendas de playa están hechas con tela reciclada proveniente de botellas PET recogidas de mares y playas colombianas. Pero ahí no termina el impacto.
Bohío trabaja con adultos mayores y madres cabeza de familia, dándoles empleo digno y capacitaciones constantes. ¿El resultado? Una cadena de valor que no solo produce ropa, sino transformación social.
Desde la perspectiva del marketing, Bohío cumple con los tres pilares del propósito auténtico:
Además, Bohío Playa no usa el propósito como táctica de campaña, sino como ADN de negocio Esa es la gran diferencia entre hacer greenwashing y construir una marca verdaderamente consciente.
Foto tomada de El Espectador
Con más de 60 años en el mercado, Alquería podría haber seguido vendiendo leche sin salirse del molde. Pero eligió otro camino: integrar la sostenibilidad y el desarrollo humano como motores de su estrategia.
A través de la Fundación Alquería Cavelier, la empresa invierte en programas educativos para niños de alto potencial en condiciones de vulnerabilidad. Su iniciativa “Vaca Madrina” permite a pequeños ganaderos acceder a vacas gestantes, tecnología y formación técnica, fortaleciendo el tejido productivo desde las zonas rurales.
Esta visión se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), especialmente en los ejes de educación de calidad, trabajo decente y producción responsable.
Desde el punto de vista del marketing, Alquería transforma su producto –la leche– en una plataforma de impacto social. Lo que el consumidor percibe no es solo un alimento, sino una marca comprometida con la equidad, el campo y el futuro.
Ambas comprenden que el propósito no es una campaña, sino una convicción estratégica. Lo integran en su modelo operativo, en su comunicación y en su propuesta de valor. A nivel académico, podemos decir que cumplen con los tres niveles del propósito organizacional según Harvard Business Review:
En un mercado tan saturado de mensajes, las marcas que perduran son las que aportan. Las que no solo responden a las necesidades del consumidor, sino que también proponen soluciones a problemas reales del entorno.
Bohío Playa y Alquería demuestran que en Colombia sí es posible hacer marketing con propósito, desde industrias tan distintas como la moda y los alimentos. Y lo hacen con resultados que combinan impacto social, fidelidad del cliente y reputación empresarial.
¿Está tu marca alineada con un propósito real o solo con un plan de medios?
Si sientes que tu estrategia puede tener más alma, más coherencia y más impacto, escríbeme. Te acompaño a construir una narrativa que no solo conecte, sino que también transforme.
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